La artemisa dulce (Artemisia annua), mejor conocida como «ajenjo dulce» o «ajenjo chino», es una planta que pertenece a la familia Asteraceae. Originaria de China, se utiliza desde hace más de 2000 años en la medicina tradicional china. Se utilizaba en particular para el tratamiento de las fiebres intermitentes y los trastornos digestivos. Permaneció en la sombra hasta el siglo pasado, y no fue hasta los años 60 y 70 cuando los estudios comenzaron a centrarse en sus virtudes.
Desde entonces, la lista de descubrimientos sobre el potencial de la artemesia dulce en fitoterapia no ha dejado de crecer. Descrita inicialmente como planta antipalúdica, numerosas investigaciones han comenzado a demostrar su potencial acción anticancerígena. Más recientemente, los estudios tienden a demostrar que la planta también es eficaz contra el SARS-COV2. Se trata de descubrimientos prometedores que deben estudiarse más a fondo.
Los principios activos y las virtudes de la artemisa dulce
La artemisa dulce es una planta con muchas virtudes, rica en vitaminas, proteínas, aminoácidos y fibras, así como en minerales y oligoelementos. También tiene un potente principio activo: la artemisinina, que muchos investigadores han estudiado. Disponible en tisana, cápsulas, polvo o tintura madre, la dosis debe adaptarse según la forma y la patología a tratar.
Debido a sus principios activos, el campo de acción de la artemisa dulce es amplio. Sus principales virtudes son las siguientes :
– Antipirético natural : reduce la fiebre.
– Propiedades digestivas : estimula la secreción de jugos digestivos, facilita la asimilación de los alimentos y tiene propiedades antiespasmódicas. Así, es muy apropiado en caso de trastornos intestinales (tratamiento de cólicos, diarreas crónicas, flatulencias, dolores de estómago e intestinales…).
– Antiparasitario : es un desparasitador eficaz para una gran variedad de parásitos.
– Potente antioxidante : es capaz de contrarrestar la acción nociva de los radicales libres.
– Antiinflamatorio : alivia el dolor debido a la enfermedad o a la medicación.
– Acciones antivirales e inmunoestimulantes : debido a su composición y a la presencia de vitaminas A y E, tiene una acción sobre las enfermedades virales y sobre el sistema inmunitario.
También es una planta apreciada por las mujeres para regular su ciclo menstrual y calmar los dolores.
Ahora, centrémonos en los virtudes terapéuticas de la artemisa dulce contra la malaria, el cáncer y el Covid 19.
La función antipalúdica de la artemisa dulce
La artemisa dulce se utiliza desde hace miles de años en la medicina china para el tratamiento de las fiebres intermitentes. Esto es lo que llevó a los investigadores chinos a investigarlo en la época de la epidemia de malaria en Asia a mediados del siglo pasado.
En 2015, la investigadora farmacéutica china Youyou Tu fue galardonada con el Premio Nobel de Medicina por sus investigaciones sobre la función antipalúdica de la artemisinina, principal compuesto activo de la artemisa dulce. Su trabajo en los años 70 puso de manifiesto su eficacia en el tratamiento de la malaria. De hecho, demostró que la artemisinina destruye el plasmodio, el parásito que circula por la sangre y es responsable de la enfermedad.
Hoy en día, el uso de la artemisa dulce está cada vez más extendido en África. Se utiliza en la prevención en los niños y en el tratamiento de los ataques de malaria mediante infusiones o cápsulas para un efecto curativo.
Estudios prometedores sobre la artemisa dulce para el tratamiento del cáncer
Desde que la planta salió a la luz gracias a la investigación sobre la malaria, los investigadores de la Universidad de Washington han realizado estudios sobre el tratamiento de ciertos cánceres. Demuestran que la artemisa dulce tiene efectos muy tóxicos sobre las células cancerosas, mientras que su efecto sobre las células sanas es mínimo. Así, se realizaron varias pruebas in vitro, que permitieron llegar a las siguientes conclusiones :
– En el caso del osteosarcoma, uno de los cánceres óseos más frecuentes, se atribuye a la planta propiedades antiproliferativas, antimetastásicas y proapoptóticas (favorables al suicidio de las células cancerosas)
– Para el cáncer de mama y la leucemia, se dice que tiene efectos inhibidores del crecimiento de las células cancerosas.
– También se han comprobado sus propiedades apoptóticas en el cáncer de colon y de estómago.
Los resultados de estos estudios preliminares son muy prometedores y sería conveniente proseguirlos, ya que encierran grandes esperanzas para el tratamiento de los cánceres.
La artemisa dulce como posible remedio para la COVID-19
Numerosas publicaciones médicas han demostrado la eficacia de la artemisa dulce contra las enfermedades víricas (herpes, gripe, etc.). Desde la epidemia de 2003, se han realizado estudios adicionales sobre la eficacia de la planta contra el SRAS. A raíz de estas investigaciones, en China se prescribió artemisa dulce en los casos de Covid-19 desde el inicio de la epidemia para los pacientes con síntomas, sobre todo pulmonares. Se han realizado estudios sobre el tema, que se están redactando actualmente, que demuestran la eficacia de la artemisa dulce en combinación con otras plantas. De hecho, se dice que los pacientes que han recibido este tratamiento a base de hierbas se recuperan más rápidamente que los que han recibido un tratamiento terapéutico convencional.
En África se están llevando a cabo investigaciones similares. Los estudios preliminares demuestran que los ingredientes activos de la artemisa dulce actúan como barrera para la penetración del virus en las células de la mucosa nasal y los pulmones al bloquear varios receptores. De este modo, impide la replicación del virus y la aparición de los signos de la enfermedad.
La ventaja es que los pacientes pueden curarse más rápidamente, con un tratamiento barato que no es tóxico ni tiene efectos secundarios.
Pero para que se demuestre científicamente la eficacia de la artemisa dulce, hay que esperar a que se realicen estudios clínicos que cumplan las normas internacionales y estén reconocidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Aunque esto es importante, tiene una gran limitación en una situación de emergencia, en la que también hay que tener en cuenta el empirismo de la medicina tradicional china, de muchos países asiáticos y de África. No vamos a insistir en este tema del protocolo.
¿Tiene la artemisa anual algún efecto adverso?
La artemisa anual es inofensiva, siempre que se utilice según las recomendaciones de uso. Sin embargo, puede resultar tóxico si se consume en exceso. Un consumo descontrolado puede provocar trastornos intestinales e incluso una intoxicación. Publicaciones recientes advierten de que el consumo incontrolado en dosis inadecuadas también puede provocar riesgos cardíacos y trastornos neurológicos, especialmente en pacientes jóvenes.
Los tratamientos anuales con artemisa suelen ser de corta duración : una semana, con una pausa antes de volver a empezar cuando se utiliza repetidamente. En casos concretos, pueden ser más largos con dosis bajas, bajo control biológico, para poder hacer descansos si es necesario.
Para las personas alérgicas o intolerantes a las plantas de la familia Asteraceae, puede provocar efectos secundarios menores como dolor abdominal, diarrea, náuseas y vómitos.
La artemisa dulce no se recomienda a las mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, ni a los niños pequeños.
Como con cualquier tratamiento, siempre es aconsejable respetar las dosis prescritas y un uso adaptado según las distintas necesidades, y consultar a un médico, un farmacéutico o un naturópata especializado en fitoterapia, antes de tomar artemisa dulce.
